Y lo pongo entre comillas, porque ya sabemos que en sí no se puede llamar debate municipal en el cual los tiempos son tan cortos, en los cuales es imposible que puedan exponer los candidatos al sillón municipal de nuestra gran Lima. Y ciertamente así fue. Sumado al tema de la pobre preparación de la gran mayoría de ellos.
Ahora de los 10 candidatos, uno no participó. Fue Renzo Reggiardo el que estaba liderando en las encuestas. Y lo digo así, porque después de esta no participación suya, para mí ya perdió.
Ahora, qué esperamos los ciudadanos limeños. Bueno pues, esperamos Propuestas, pero buenas propuestas que sean realizables, realistas. Es decir, que se puedan plasmar en la realidad.
Al único candidato que pude apreciar que manejaba cifras es a Jaime Salinas, el cual vi que se manejaba con mucha solvencia. He allí el detalle amigos! Podemos ofrecer “el oro y el moro”, total fácil es ofrecer. El tema es si lo podremos cumplir. En esto Salinas señaló que él será un gestor municipal, un luchador para que el Estado provea una partida del Presupuesto Nacional.
El candidato Zurek iba bien, hasta que ofendió a la candidata Capuñay, lo cual me incomodó, y por ello creo que bajó la calidad de su performance. Ya pues señor Zurek esa no es la forma de expresarse, y menos cuando se dirige a una dama. En este punto muy bien los moderadores al llamarle la atención. En fin, estamos atentos al segundo debate.
Saludos, la socióloga Hilda Padilla Sánchez