Rumanía ha aprobado una modificación legal por la que se impedirá difundir en las aulas la ideología de género que, contra la biología, asegura que el sexo determinado por el ADN es diferente del llamado ‘género’, que puede o no coincidir con la conocida combinación cromosómica XX (mujer) o XY (varón).
La decisión se ha tomado tras un proceso legislativo para modificar la Ley Nacional de Educación cuya propuesta arrancó el pasado mes de noviembre con su registro en el Congreso de Rumanía y que fue debatida en el pleno el pasado 2 de febrero y ratificado por el Senado el pasado 17 de junio.
La modificiación legal estipula que «en las instituciones educativas y en todos los espacios destinados a la educación y formación profesional, incluidas las unidades que ofrecen educación extracurricular, están prohibidas las siguientes: a) actividades que violen las normas de la moralidad; b) actividades que puedan poner en peligro la salud y la integridad física o mental de niños y jóvenes, respectivamente del personal docente, el personal docente auxiliar y el personal no docente; c) actividades políticas; d) proselitismo religioso; e) actividades para difundir la teoría u opinión de la identidad de género, entendida como la teoría u opinión de que el género es un concepto diferente del sexo biológico y que los dos no son siempre iguales; f) actividades que contravengan los principios previstos en el art. 3 ”(respectivamente, los principios que rigen la educación preuniversitaria y superior, así como el aprendizaje permanente en Rumania, de acuerdo con la Ley Nacional de Educación).
El impulsor de la iniciativa es el líder del partido Parlamento del Movimiento Popular (PMP) Emil-Marius Pascan que fue senador del Partido Democrático Liberal entre 2012 y 2016 y que desde entonces entró en el Congreso con su nuevo partido, tras un breve paso por el Partido Nacional Liberal.
Emil-Marius Pascan señaló que el presidente de Rumania, el Sr. Klaus Iohannis, no está de acuerdo con las disposiciones de nuestro proyecto de ley, aprobado por el Senado, y que el jefe de estado no promulgará la ley cuando llegue a la Administración Presidencial, según menciona el político rumano : “El presidente sería descalificado en términos de credibilidad insuperable, si es que no aprueba el pedido del Congreso, que ha aprobado la ley que el pueblo rumano pide”.